Internet seprotección de datos ha convertido en la gran revolución de la comunicación. Pero, al tiempo que esta herramienta tan poderosa se ha ido sofisticando, las amenazas contra la privacidad y la protección de los datos personales también han ido creciendo. La red está plagada de información personal, en muchos casos perteneciente al ámbito más privado pero a la que todos podemos acceder sin ninguna dificultad. Información que se perpetúa en internet con las repercusiones que la misma puede tener para las personas afectadas en el futuro (por ejemplo, acusaciones de delitos que terminaron en absolución; publicación de deudas aunque las mismas ya fueran saldadas, etc.).

Son muchas las voces que han reflexionado sobre este problema que plantea la libre circulación de datos en internet. Una es la del director de la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), José Luis Rodríguez Álvarez, que considera internet como “el ingenio tecnológico que más impacto ha tenido y está teniendo sobre la esfera privada de las personas”.

En este sentido, destacan las consecuencias positivas que conlleva esta herramienta para el desarrollo del conocimiento, pero sin olvidar la repercusión que una capacidad de almacenamiento y difusión potencialmente ilimitada de la información puede tener en la vida de los ciudadanos. A su juicio, la forma en la que se afronten estas cuestiones determinará el tipo de sociedad que construimos, “una en la que los individuos puedan desarrollarse libremente, o una en la que el recuerdo permanente y la conciencia de que todo queda registrado condicione el libre desarrollo de la personalidad”.

El cloud computing (servicios de la nube) y las cookies son algunos de los retos para la privacidad de las personas a las que la propia AEPD ha dado respuesta en dos guías, una para clientes y otra para proveedores. Pero hay más problemas en relación con la protección de datos: las redes sociales, las aplicaciones, el spam o el denominado ‘derecho al olvido’. A la espera de que la UE apruebe su Reglamento sobre Protección de Datos, previsto para este año y que regulará este derecho, la Agencia recibe cada vez más demandas de cancelación de datos personales provenientes del canal internet.

De momento, la Justicia no contempla el ‘derecho al olvido’ porque supondría una injerencia en la libertad de expresión y un ejercicio de censura por parte de un particular. En estos términos se pronunció el pasado mes de junio de 2013 el abogado general del Tribunal de Justicia de la UE, Niilo Jääskinen, que dio la razón a Google ante la consulta planteada por la Audiencia Nacional sobre un procedimiento iniciado por la AEPD contra el gigante norteamericano.

Para el abogado del Estado-jefe de la AEPD, Agustín Puente, este derecho es una reformulación adaptada a Internet de los tradicionales derechos de cancelación y oposición. No obstante, en su opinión es necesario analizar cada caso de forma individualizada y su aplicación no ha de afectar en ningún caso a las fuentes cuando se trata de publicaciones legítimas, sean boletines oficiales o hemerotecas.

Otro asunto preocupante es la protección de la privacidad de los menores en internet, un colectivo que en muchos casos desconoce o no conoce plenamente el valor de la privacidad y de los datos personales, y que puede resultar vulnerable ante ofertas y servicios online que son abiertos y carecen de procedimientos eficaces de verificación de la edad. Además de la responsabilidad de los padres y tutores, cada vez son más los que reclaman la existencia de protocolos en las redes sociales que protejan a este colectivo tan vulnerable.