El martes 16 de julio Conversia celebró el Check Point Julio 2019 de la compañía. Durante la jornada hubo tiempo tanto para tratar asuntos corporativos como para realizar actividades de ocio y deporte, entre las cuáles se organizó un taller maridaje de ratafía.
Can Moragues de Riudarenes, situado a pocos quilómetros del Hotel Mas Solà, fue el sitio escogido para realizar el taller maridaje de ratafía, en el marco de la celebración del Check Point Julio 2019 de Conversia. Una veintena de los asistentes disfrutaron de una divertida y amena sesión en la que dos miembros de la Cooperativa La Sobirana les enseñaron a degustar distintos tipos de ratafía desde una nueva perspectiva, descubriendo los paisajes y los proyectos que esconden detrás. Además, se acompañó el maridaje con dulces tradicionales de la zona.
Cuando los participantes llegaron a Can Moragues, junto a los asistentes al taller de elaboración de mermelada, los responsables de la finca realizaron una explicación sobre los proyectos que llevan a cabo: desde la Fundación Emys que trabaja para la conservación de la naturaleza hasta los programas educativos para sensibilizar a los más jóvenes, pasando por el proyecto social de elaboración de mermeladas, un obrador ecológico de productos de proximidad que conserva la naturaleza a la vez que ayuda a las personas con riesgo de exclusión social y/o con discapacidad.
A continuación, los participantes del taller maridaje de ratafía tomaron asiento y empezaron la sesión. En primer lugar, los dinamizadores retaron a los participantes a taparse la nariz y probar el contenido de un bote para poner a prueba sus papilas gustativas. Se trataba de canela y casi todos lo adivinaron. Seguidamente, los responsables de La Sobirana explicaron a los asistentes la historia de la ratafía, un licor elaborador a partir de la maceración de distintos frutos como la nuez verde y varias especias en un alcohol de base, generalmente aguardiente, muy típico de Santa Coloma de Farners.
Durante la sesión, los participantes pudieron probar cuatro tipos de ratafía que se maridaron con distintos productos de la zona: Russet, maridada con avellanas; Malhivern, maridada con galletas Trias; y dos variedades de 1842, la primera se probó después de masticar una hoja de menta y la otra se maridó con queso y mermelada de higos.
Descubre el resto de las actividades en las que participaron los asistentes al Check Point Julio de Conversia: Salsa, Body Combat, Escape Room, Torneo de Pádel, Taller elaboración mermelada.
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